31 mayo 2006

Un día aciago para Mariano Rajoy

Ayer el jefe de la oposición tuvo uno de sus peores días como líder del PP. Se quedó varias veces sin argumentos políticos y dió razones sobradas para que sus correligionarios comiencen a preocuparse por su liderazgo.
Mariano Rajoy deambuló sin rumbo durante todo sus intervenciones. Intentó atacar al Presidente Zapatero con argumentos falaces que fueron fácilmente desmontados con datos objetivos y cifras contrastadas.

El mejor ejemplo de la impotencia demostrada por el lider de la oposición fue cuando se enzarzó en una lucha sin sentido con Manuel Marín. Se quejó infantilmente cual niño de parvulario de no poder disponer de más tiempo para exponer sus argumentos. Parece ser que Rajoy olvida, aunque Marín ya se lo recordó, que el Gobierno no tiene límite de tiempo en sus intervenciones y que la oposición al contrario si que lo tiene. Tuvieron ocho años para cambiar las reglas de juego ¿Porqué no lo hicieron?
Marín, que ya está acostumbrado a este tipo de tergiversaciones, tuvo que tirar de archivo para demostrar que una vez más el PP mentía.
Además tampoco vendría mal recordar a la bancada pepera que el debate del Estado de la Nación lo creó Felipe González, allá por el año 1983.

En el PP andan exaltados. Viven en una vorágine de descalificaciones y de marrullería. El último episodio lo vivimos ayer con la pataleta de Rajoy y con el corte de mangas que dedicó un parlamentario popular a Manuel Marín. Todo muy democrático.

Es normal, con el revolcón que les dió el Presidente Zapatero no resulta difícil entender porqué los populares estaban tan exaltados.
Rajoy criticó la política de inmigración y cometió su primer error. Criticó que se hubiera aprobado la regularización masiva de inmigrantes como si los inmigrantes hubieran aparecido de la nada en los dos últimos años. Zapatero le recordó a Rajoy que mientras ellos gobernaban en España había un millón y medio de inmigrantes irregulares. ¿Qué hizo el PP en su momento?. Nada. Simplemente permitió que esos inmigrantes conformaran una bolsa de trabajo irregular, en que no tenían derechos como trabajadores, ni los empresarios tenían obligaciones. Además de causar un perjuicio económico colosal a la Seguridad Social.

Rajoy también criticó las modificaciones estatutarias. Aunque obvió alegremente el nuevo Estatuto de la Comunidad Valenciana o el que va a surgir pronto del Parlamento Balear. Evidentemente son Comunidades gobernadas por el PP y a pesar de tener puntos en sus estatutos más agresivos que el catalán, para Rajoy no era motivo de debate.
El mejor ejemplo de la hipocresía popular es la ya famosa "cláusula Camps". Esta cláusula supone la inmediata aplicación de cuantas medidas de mejora de autogobierno se aprueben en las demás reformas autonómicas. De facto es un blindaje competencial, cosa que es inconstitucional a todas luces.
Además siendo un poco maquiavélicos, también supone anular cualquier diferencia entre el Estatut catalán y el valenciano. Y si para el PP el Estatut catalán es inconstitucional ¿Cómo califican al Estatut valenciano?¿También es un engendro? O ya no lo es porque el PP lo ha aprobado.

Otro momento destacado fue cuando Rajoy brindó su apoyo en el diálogo con ETA, supeditado a no pagar ningún tipo de precio político. Hasta aquí todo correcto. Pero......¿Aznar no acercó presos en la negociación/diálogo con el Movimiento de Liberación Nacional?. Porqué el PP pudo usar la baza de los presos etarras en su acercamiento a la banda terrorista y ahora niegan cualquier tipo de márgen a Zapatero para negociar una paz tan deseada por todos los españoles.
¿Porqué tanta hipocresía?

Hubieron también otros momentos brillantes. Como cuando Zapatero le espetó a Rajoy "Son ustedes profetas del desastre y, además, son un desastre como profetas".
Tenía toda la razón.
El PP acusó al PSOE, afirmando que iban a dilapidar la herencia económica de la era Aznar. Pues bien, ni el paro ha subido, ni la situación económica ha empeorado. Es más se podría añadir que las bases para ese empuje económico los puso Pedro Solbes cuando era Ministro de Economía en la época de Felipe González.

Cierto es que la intervención del Presidente Zapatero estuvo impregnada de una pátina autocomplaciente. ¿Qué presidente no lo ha hecho?.
Pero hubieron puntos que se deberían haber tocado y que pasaron inadvertidos para los políticos, para los ciudadanos no.
¿Qué va a pasar con el precio de la vivienda?¿Qué medidas piensa tomar el Presidente para conseguir que la juventud pueda acceder a una vivienda sin que sus descendientes hereden su hipoteca?. ¿Qué va a pasar con la inflación incipiente que nos está quitando a todos los españoles poder adquisitivo?.¿Qué medidas se piensan tomar para que no sigan entrando por nuestras fronteras tantos delincuentes y mafiosos camuflados de inmigrantes?.